Son 276 los funcionarios que cobran sin trabajar
{ Posted on 11:56
by Patricia Càceres
}
Excedentarios. Ley habilita a que sean retomados por un año; llamaron solo a 30 | Oposición critica política de ingreso en empleo público
EDUARDO DELGADO
Hay 276 funcionarios públicos excedentarios a disposición en sus casas y cobrando sueldo, algunos desde hace más de 10 años. Solo 30 de ellos fueron retomados para tareas transitorias durante un año, según cifras oficiales.
Los excedentarios que sean llamados para tareas transitorias tienen la obligación de concurrir a trabajar y quienes no lo hagan se considera que renunciaron a sus cargos. Eso ocurrió con tres funcionarios del Correo, cuyo trámite de renuncia realiza la Oficina Nacional del Servicio Civil (ONSC).
La ley que habilitó a declarar funcionarios excedentarios data de 1996, por lo que hay empleados públicos que hace más de 10 años que cobran su sueldo básico y una compensación, pero sin trabajar.
El artículo 12 de ley 17.930 (de presupuesto nacional) aprobada en 2005 fue la que habilitó el reingreso por un año de los funcionarios excedentarios que sean requeridos por un organismo público.
Disminuir la cantidad de excedentarios utilizando sus servicios para tareas transitorias o zafrales, en vez de contratar a nuevos funcionarios fue lo que inspiró este artículo del presupuesto, pero la opción que habilita fue utilizada en pocos casos. Según la información que maneja la ONSC, 30 empleados de la administración pública fueron retomados, algunos ya cumplieron el año de trabajo que prevé la ley, y volvieron a su situación anterior, cobrando pero sin desempeñar tareas.
El artículo de la ley de presupuesto nacional prevé que los funcionarios excedentarios eximidos del deber de asistencia a su lugar de trabajo, estarán a la orden de la ONSC, "debiendo comparecer toda vez que sean citados por ésta para el desempeño de funciones transitorias en caso de necesidades extraordinarias de personal, en cualquier organismo público que así lo solicite".
La norma indica que en esas situaciones y por el tiempo que dure el desempeño de las tareas encomendadas, "el funcionario quedará sometido a las normas disciplinarias correspondientes".
"La no comparecencia del funcionario a dos citaciones, sin causa justificada, configurará su renuncia tácita, extremo que será comprobado por la ONSC, mediante los procedimientos que ésta determine", concluye el texto del artículo.
Según los datos que maneja la ONSC y a los que accedió El País, el Ministerio de Educación y Cultura es el organismo público con mayor cantidad de funcionarios excedentarios (más de 100). Lo siguen el Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca, y el Ministerio de Economía y Finanzas (ambos con más de 50 funcionarios en esta condición. En número más bajo, el Correo y el Ministerio de Defensa son otros organismos que tienen excedentarios.
La ley 16.736 de 1996 fue la que dispuso el "régimen de excedencia de cargos y funciones contratadas de los funcionarios de la Administración Central, en virtud de su disponibilidad resultante de reestructuras".
Esa ley dispuso que los funcionarios presupuestados o contratados para la función pública que fueron declarados disponibles por reestructura, pasaran a redistribución por un lapso de 12 meses.
Durante ese período, mantuvieron todos los derechos emergentes de su situación funcional y percibieron su sueldo base, beneficios sociales, compensación por antigüedad y por ocho horas, y compensaciones extraordinarias que percibían hasta el mes inmediato anterior al de su cambio de situación funcional, pero quedando eximidos en su obligación de asiduidad.
Una vez vencido dicho plazo, quienes no ocuparon un nuevo cargo o función contratada, podían optar por abandonar definitivamente la función pública. Quienes así lo hicieron y tenían más de dos años de antigüedad, recibieron una compensación equivalente a seis meses de retribución, aumentada en un mes por cada año continuo de antigüedad en la función pública, hasta un tope máximo de 12 meses.
Los funcionarios que no optaron por abandonar definitivamente la función pública, reciben como única retribución la establecida en la tabla básica de sueldos, más la compensación máxima del grado incluida la prima de antigüedad y beneficios sociales.
Además de estos 276 funcionarios excedentarios, hay otros 49 funcionarios declarados excedentarios por sus organismos pero que continúan prestando servicios hasta que sean redistribuidos a otra dependencia estatal y en tanto cobran el total de su sueldo, incluidas partidas especiales.
La excepción son los funcionarios de la ex Pluna, que al haber desaparecido su oficina de origen cobran sin ir a trabajar.
cifras. LA ONSC tiene actualizada la cifra de funcionarios públicos al 30 de junio de 2008. Contabilizó 256.037 vínculos laborales con el Estado, de los cuales 240.261 son "vínculos de naturaleza pública (funcionarios públicos) y 15.776 de naturaleza no pública (becarios, pasantes, contratos a termino, arrendamiento de obras y cargos de confianza) que representan el 6% de todos los vínculos con el Estado.
Dentro de los funcionarios públicos se produjo una reducción de 1.420 puestos (0,59%) con relación al anterior informe de la ONSC de diciembre de 2007. Dentro de los restantes vínculos hubo un incremento del 22%, que se dio en la categoría "otros" y que incluye contratos en el área del Ministerio de Salud Pública y el Ministerio de Educación y Cultura.
correo. El vicepresidente del Correo, Julio Vieytes, relató que ese organismo contaba con 19 funcionarios excedentarios y que sobre la base de la ley de Presupuesto todos fueron llamados para que se reintegren a diversas tareas. Agregó que 16 están trabajando en el Correo desde meses atrás y otros tres no se presentaron al llamado porque están en el exterior, por lo que la ONSC tramita su renuncia, como está previsto en la ley que habilita su reingreso por un año.
Vieytes afirmó que varios de los que volvieron al Correo tenían otros trabajos. Agregó que de los 16 que retornaron, muy pocos manifestaron real interés en hacerlo y que la mayoría lo hizo solo porque de lo contrario perdería su cargo público.
Testimonio
Acosta: "Yo solo quería volver a trabajar"
Mirtha Acosta es una de las funcionarios excedentarias del Correo, que el 19 de enero de 2009 regresó a cumplir tareas en ese organismo.
"Yo solo quería volver a trabajar", dijo a El País.
Acosta fue declarada excedentaria en 1998. En ese momento, se adujeron razones de reestructuras y cambios en el Correo.
La funcionaria recordó que hasta 2005, que fue aprobada la ley de Presupuesto, no tenía marco legal para intentar retornar. Pero que luego de esa fecha buscó volver a trabajar en el Correo y que para concretarlo contó con el apoyo del sindicato y del Directorio.
Su expectativa es que cuando termine el año por el que fue retomada, pueda seguir trabajando en el Correo y dijo que otro funcionario excedentario retomado en Salto desea lo mismo.
Acosta afirma que fueron muy duros para ella los años fuera del Correo, su sueldo bajó porque no cobraba compensaciones y por su edad (52 años) se le cerraban las puertas a otros trabajos fijos, por lo que realizó ventas por su cuenta.
Alfie: "No creo en datos oficiales"
"Salvo en las estadísticas del Banco Central, yo no creo en las estadísticas del gobierno. Ellos hacen los números como quieren. En el tema de los empleados públicos, pueden sacar y poner lo que quieran. La serie no es consistente", advirtió a El País el senador colorado Isaac Alfie, respecto a la información del gobierno sobre la cantidad de empleados en el Estado.
Las cifras oficiales indican que, hasta mediados de 2008, había 223.443 funcionarios públicos, cifra algo inferior a la del año 2007 (224.763 personas) y claramente superior a la de 2005 (215.081 empleados).
"Todo el esfuerzo hecho durante diez años, desde 1995 en adelante, de bajar más de 50.000 funcionarios públicos, se echa por la borda en cuestión de dos o tres años. Han ingresado funcionarios por decenas y por miles, y se triplicaron los cargos de particular confianza y también los de confianza política", opinó Alfie.
La oposición ha mostrado una visión muy crítica sobre el ingreso de nuevos empleados públicos durante la administración del presidente Tabaré Vázquez.
CIFRAS. En la misma línea que Alfie, el senador blanco Sergio Abreu dijo a El País que la actual situación responde al ingreso desmedido de funcionarios (cinco por hora hábil entre 2005 y 2007, según una estadística que elaboró Alfie y que Abreu respalda); la creación de decenas de personas públicas no estatales con "varios sueldos de ministro por directorio"; y, por último, cerca de 200 nuevos contratos de particular confianza.
"Hay una gran desigualdad y asimetría entre el empleado privado y el empleado público. Cuando hay crisis, los privados pasan a seguro de paro o directamente los destituyen. En el Estado, la empresa pública sigue perdiendo, pero el empleado no es la variable de ajuste en un momento de crisis. A eso se agrega la presión corporativista, una nueva expresión del clientelismo político", indicó Abreu.
Según publicó el semanario Búsqueda en enero pasado, Alfie calculó que entre 2005 y 2007 ingresaron en el Estado "cinco funcionarios por hora hábil", que además "no mejoraron los servicios" y constituyen "una gimnasia que le cuesta mucho al sector privado".
Alfie calculó que en el período mencionado se cubrieron unas 6.500 vacantes anuales por concepto de jubilación, fallecimiento y otras causas y se agregaron unos 12.000 nuevos funcionarios, lo que daría unos 30.000 funcionarios en total.
El País Digital
EDUARDO DELGADO
Hay 276 funcionarios públicos excedentarios a disposición en sus casas y cobrando sueldo, algunos desde hace más de 10 años. Solo 30 de ellos fueron retomados para tareas transitorias durante un año, según cifras oficiales.
Los excedentarios que sean llamados para tareas transitorias tienen la obligación de concurrir a trabajar y quienes no lo hagan se considera que renunciaron a sus cargos. Eso ocurrió con tres funcionarios del Correo, cuyo trámite de renuncia realiza la Oficina Nacional del Servicio Civil (ONSC).
La ley que habilitó a declarar funcionarios excedentarios data de 1996, por lo que hay empleados públicos que hace más de 10 años que cobran su sueldo básico y una compensación, pero sin trabajar.
El artículo 12 de ley 17.930 (de presupuesto nacional) aprobada en 2005 fue la que habilitó el reingreso por un año de los funcionarios excedentarios que sean requeridos por un organismo público.
Disminuir la cantidad de excedentarios utilizando sus servicios para tareas transitorias o zafrales, en vez de contratar a nuevos funcionarios fue lo que inspiró este artículo del presupuesto, pero la opción que habilita fue utilizada en pocos casos. Según la información que maneja la ONSC, 30 empleados de la administración pública fueron retomados, algunos ya cumplieron el año de trabajo que prevé la ley, y volvieron a su situación anterior, cobrando pero sin desempeñar tareas.
El artículo de la ley de presupuesto nacional prevé que los funcionarios excedentarios eximidos del deber de asistencia a su lugar de trabajo, estarán a la orden de la ONSC, "debiendo comparecer toda vez que sean citados por ésta para el desempeño de funciones transitorias en caso de necesidades extraordinarias de personal, en cualquier organismo público que así lo solicite".
La norma indica que en esas situaciones y por el tiempo que dure el desempeño de las tareas encomendadas, "el funcionario quedará sometido a las normas disciplinarias correspondientes".
"La no comparecencia del funcionario a dos citaciones, sin causa justificada, configurará su renuncia tácita, extremo que será comprobado por la ONSC, mediante los procedimientos que ésta determine", concluye el texto del artículo.
Según los datos que maneja la ONSC y a los que accedió El País, el Ministerio de Educación y Cultura es el organismo público con mayor cantidad de funcionarios excedentarios (más de 100). Lo siguen el Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca, y el Ministerio de Economía y Finanzas (ambos con más de 50 funcionarios en esta condición. En número más bajo, el Correo y el Ministerio de Defensa son otros organismos que tienen excedentarios.
La ley 16.736 de 1996 fue la que dispuso el "régimen de excedencia de cargos y funciones contratadas de los funcionarios de la Administración Central, en virtud de su disponibilidad resultante de reestructuras".
Esa ley dispuso que los funcionarios presupuestados o contratados para la función pública que fueron declarados disponibles por reestructura, pasaran a redistribución por un lapso de 12 meses.
Durante ese período, mantuvieron todos los derechos emergentes de su situación funcional y percibieron su sueldo base, beneficios sociales, compensación por antigüedad y por ocho horas, y compensaciones extraordinarias que percibían hasta el mes inmediato anterior al de su cambio de situación funcional, pero quedando eximidos en su obligación de asiduidad.
Una vez vencido dicho plazo, quienes no ocuparon un nuevo cargo o función contratada, podían optar por abandonar definitivamente la función pública. Quienes así lo hicieron y tenían más de dos años de antigüedad, recibieron una compensación equivalente a seis meses de retribución, aumentada en un mes por cada año continuo de antigüedad en la función pública, hasta un tope máximo de 12 meses.
Los funcionarios que no optaron por abandonar definitivamente la función pública, reciben como única retribución la establecida en la tabla básica de sueldos, más la compensación máxima del grado incluida la prima de antigüedad y beneficios sociales.
Además de estos 276 funcionarios excedentarios, hay otros 49 funcionarios declarados excedentarios por sus organismos pero que continúan prestando servicios hasta que sean redistribuidos a otra dependencia estatal y en tanto cobran el total de su sueldo, incluidas partidas especiales.
La excepción son los funcionarios de la ex Pluna, que al haber desaparecido su oficina de origen cobran sin ir a trabajar.
cifras. LA ONSC tiene actualizada la cifra de funcionarios públicos al 30 de junio de 2008. Contabilizó 256.037 vínculos laborales con el Estado, de los cuales 240.261 son "vínculos de naturaleza pública (funcionarios públicos) y 15.776 de naturaleza no pública (becarios, pasantes, contratos a termino, arrendamiento de obras y cargos de confianza) que representan el 6% de todos los vínculos con el Estado.
Dentro de los funcionarios públicos se produjo una reducción de 1.420 puestos (0,59%) con relación al anterior informe de la ONSC de diciembre de 2007. Dentro de los restantes vínculos hubo un incremento del 22%, que se dio en la categoría "otros" y que incluye contratos en el área del Ministerio de Salud Pública y el Ministerio de Educación y Cultura.
correo. El vicepresidente del Correo, Julio Vieytes, relató que ese organismo contaba con 19 funcionarios excedentarios y que sobre la base de la ley de Presupuesto todos fueron llamados para que se reintegren a diversas tareas. Agregó que 16 están trabajando en el Correo desde meses atrás y otros tres no se presentaron al llamado porque están en el exterior, por lo que la ONSC tramita su renuncia, como está previsto en la ley que habilita su reingreso por un año.
Vieytes afirmó que varios de los que volvieron al Correo tenían otros trabajos. Agregó que de los 16 que retornaron, muy pocos manifestaron real interés en hacerlo y que la mayoría lo hizo solo porque de lo contrario perdería su cargo público.
Testimonio
Acosta: "Yo solo quería volver a trabajar"
Mirtha Acosta es una de las funcionarios excedentarias del Correo, que el 19 de enero de 2009 regresó a cumplir tareas en ese organismo.
"Yo solo quería volver a trabajar", dijo a El País.
Acosta fue declarada excedentaria en 1998. En ese momento, se adujeron razones de reestructuras y cambios en el Correo.
La funcionaria recordó que hasta 2005, que fue aprobada la ley de Presupuesto, no tenía marco legal para intentar retornar. Pero que luego de esa fecha buscó volver a trabajar en el Correo y que para concretarlo contó con el apoyo del sindicato y del Directorio.
Su expectativa es que cuando termine el año por el que fue retomada, pueda seguir trabajando en el Correo y dijo que otro funcionario excedentario retomado en Salto desea lo mismo.
Acosta afirma que fueron muy duros para ella los años fuera del Correo, su sueldo bajó porque no cobraba compensaciones y por su edad (52 años) se le cerraban las puertas a otros trabajos fijos, por lo que realizó ventas por su cuenta.
Alfie: "No creo en datos oficiales"
"Salvo en las estadísticas del Banco Central, yo no creo en las estadísticas del gobierno. Ellos hacen los números como quieren. En el tema de los empleados públicos, pueden sacar y poner lo que quieran. La serie no es consistente", advirtió a El País el senador colorado Isaac Alfie, respecto a la información del gobierno sobre la cantidad de empleados en el Estado.
Las cifras oficiales indican que, hasta mediados de 2008, había 223.443 funcionarios públicos, cifra algo inferior a la del año 2007 (224.763 personas) y claramente superior a la de 2005 (215.081 empleados).
"Todo el esfuerzo hecho durante diez años, desde 1995 en adelante, de bajar más de 50.000 funcionarios públicos, se echa por la borda en cuestión de dos o tres años. Han ingresado funcionarios por decenas y por miles, y se triplicaron los cargos de particular confianza y también los de confianza política", opinó Alfie.
La oposición ha mostrado una visión muy crítica sobre el ingreso de nuevos empleados públicos durante la administración del presidente Tabaré Vázquez.
CIFRAS. En la misma línea que Alfie, el senador blanco Sergio Abreu dijo a El País que la actual situación responde al ingreso desmedido de funcionarios (cinco por hora hábil entre 2005 y 2007, según una estadística que elaboró Alfie y que Abreu respalda); la creación de decenas de personas públicas no estatales con "varios sueldos de ministro por directorio"; y, por último, cerca de 200 nuevos contratos de particular confianza.
"Hay una gran desigualdad y asimetría entre el empleado privado y el empleado público. Cuando hay crisis, los privados pasan a seguro de paro o directamente los destituyen. En el Estado, la empresa pública sigue perdiendo, pero el empleado no es la variable de ajuste en un momento de crisis. A eso se agrega la presión corporativista, una nueva expresión del clientelismo político", indicó Abreu.
Según publicó el semanario Búsqueda en enero pasado, Alfie calculó que entre 2005 y 2007 ingresaron en el Estado "cinco funcionarios por hora hábil", que además "no mejoraron los servicios" y constituyen "una gimnasia que le cuesta mucho al sector privado".
Alfie calculó que en el período mencionado se cubrieron unas 6.500 vacantes anuales por concepto de jubilación, fallecimiento y otras causas y se agregaron unos 12.000 nuevos funcionarios, lo que daría unos 30.000 funcionarios en total.
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